Preparación para Tatuarse:
– Es importante acudir a tu sesión de tatuaje habiendo dormido y descansado lo suficiente: El cansancio repercute negativamente en la fijación del color y en la rigidez de tu piel.
– Es desaconsejable tatuarse en periodos de gran nerviosismo, estados anímicos alterados, bajo los efectos de un catarro o gripe y en el periodo menstrual en el caso de las mujeres, debido a que ello influye en la sensibilidad cutánea.
– Beber alcohol desde el día anterior a la sesión disminuye la densidad de la sangre ocasionando la posibilidad de un mayor sangrado en la zona tatuada y expulsando parte de la tinta, ante lo cual si el tatuador insiste en la punción para un buen resultado de color, el dolor podría aumentar.
– Es indispensable cuidar tu higiene personal antes de cada sesión, dúchate el día de tu cita.
– Si utilizas cremas anestésicas o similares, informa a tu tatuador/a al contratar tu cita y antes de comenzar la sesión. Estos productos influyen en la rigidez de tu piel.
Curación y Cuidado de tu Tatuaje:
– Una vez terminado retira el vendaje plástico entre una y dos horas después.
– Lávate las manos con jabón neutro cada vez antes de tocar la zona tatuada o curar tu tatuaje.
– Cura tu tatuaje tres o cuatro veces al día durante ocho o diez días respetando el proceso aquí indicado.
– Aplica crema regeneradora sobre el tatuaje durante las primeras dos semanas. No es necesario aplicar una gran cantidad, pero debe estar siempre hidratado.
– Si dejas que tu tatuaje se seque en exceso o lo expones a la fricción constante de la ropa, o las sábanas, podría irritarse, infectarse o perder color más allá de lo normal.
– El exceso de crema regeneradora o hidratante puede provocar que el tatuaje expulse demasiada tinta o que salgan granitos en la zona.
– Lava tu tatuaje con tu ducha diaria, o como mucho tres veces al día. Siempre con agua fría o templada. Deja secar el tatuaje al aire o usa una toallita de papel, dando pequeños toques secándolo por absorción, nunca arrastrándola. No utilices toallas, paños, ni mucho menos frotes. Protégelo también al acostarte para evitar manchar sábanas, pijama, etc.
– Procura dejar que el tatuaje se cure al aire. Si no es posible, protégelo con las gasas necesarias; No uses film transparente, ya que no transpira y es un foco de bacterias.
– Es normal que durante los primeros días la zona este algo inflamada, enrojecida y caliente. El proceso de curación es de aproximadamente dos semanas y la zona podría sangrar o expulsar tinta de forma leve. También pueden aparecer pequeñas costras si la zona no se mantiene hidratada. No te rasques, ni las arranques: Deja que caigan de forma natural.
– Durante al menos dos semanas evita que tu mascota pueda rozar la zona del tatuaje. La exposición al sol o a rayos Uva. También el contacto con agua de la playa, la piscina, la sauna, el jacuzzi, así como contacto con polvo, para prevenir posibles infecciones. Después sigue usando crema hidratante y protección solar.
– Recuerda que una correcta higiene, un entorno limpio y un cuidado responsable de tu tatuaje evitarán complicaciones e infecciones. Ayudando a que cure adecuadamente y se mantenga óptimo durante más tiempo.
– Si tienes alguna duda o surge algún problema con tu tatuaje VEN A VERNOS cuanto antes.
*TELÉFONOS DE ATENCIÓN EN CASO DE DUDA URGENTE: